Hace ya un tiempo que vengo machacando con que me gustaría ver más restaurantes con carta en braile o, lo que sería mejor aún y casi utópico, ver una ciudad preparada para albergar a todos. A lo que no ven, a los que utilizan sillas de rueda y una larga lista de etcéteras. A todos.

Hoy, leyendo el diario, doy con la grata noticia de que el Consejo Deliberante de la Ciudad de Córdoba aprobó una ordenanza que, según dice en su artículo primero:

ESTABLECESE la obligatoriedad de exhibir cartas y menúes en sistema braille y en macrotipo en los establecimientos gastronómicos de la ciudad  de Córdoba.

Si bien es cierto que pone una mochila a los empresarios del sector, no creo sea tan significativa como lo es para los que están del otro lado y se encuentran con cartas que no puede leer. Además, como bien dice en los fundamentos:

Esta exigencia ya ha sido incorporada en otras ciudades de nuestro país, tales como la ciudad autómoma de Buenos Aires Ley 66, en Entre Rios, Catamarca, Paraná, Bariloche, Rosario.

Ahora solo resta cruzar los dedos y rogar que se cumpla, que no es poca cosa.

Adjunto la ordenanza por si alguien quiere chusmear un poco mas:

Cartas en braile por ordenanza

Créditos de la foto a quien corresponda.