Hace apróximadamente un año me llegaba una recomendación «Tenés que probar el Sanguchancho de Bar El Popular«. El tiempo pasó y las vueltas de la vida quisieron que mi primera visita a esta lugar sea recién este fin de semana.
Llegué al Bar El Popular cerca de las 22hs. bajo una lluvia que limitaba el uso del patio y vereda que por lo que se pudo ver están bastante bien preparados para recibir comenzales. El lugar no tenía mesa disponible así que tomé una cerveza en la barra mientras esperaba mi lugar.
El frío y mi estado gripal pedían a gritos algo calentito por lo que no dudé en pedir una porción de Guiso de lenteja($55). No tenían, se habían quedado sin el día anterior. Como plan B decidí ir a lo seguro, pedí el Sanguchancho que me recomendaron oportunamente. No lo elaboran más. Entonces acepté la sugerencia de la gente del lugar e incliné la balanza para el lado de la Napolitanga($75) que según decían la hacen tan rica y abudante que recomendaban sea para compartir.
Ya apostado en la mesa el mozo trajo una crema echa a base de mayonesa casera, ají, ciboulette para untar en un pan casero que intentó ser caliente pero el frío de la noche le ganó la batalla. Pese a la temperatura indecisa fue una excelente idea para paliar la espera picando algo rico mientras continuaba con mi cerveza.
Minutos después llegó la vedette de la noche, la Napolitanga. Una imponente, soberbia y deliciosa milanesa a la napolitana elaborada con carne carne, nada de un papel de calcar rebozado como nos tienen acostumbrados algunos, acompañado por papas fritas de verdad, no me vengan con McCain ni otras mariconadas esto era papa papa, más un huevo frito a caballo que no era solo uno sino dos y en un punto justo para mojar un pancito (pancito que dicho sea de paso jamás existió pero se las dejo pasar). La porción de la Napolitanga es sin duda una de las más grande que probé. Sin haber preguntado pero a ojo de buen cubero me animo a arriesgar que está rondando el kilogramo por plato.
Este bar llegó para rendirle honores a la movida de bares populares que viene creciendo en otros territorios en los que los platos son simples, con mucho sabor y a las cosas se las llama por su nombre. Es un lugar para visitar sin mayores protocolos para disfrutar de platos y tragos con una excelente relación entre precio y calidad.
En contra. Si bien el baño tiene jabón líquido y abundante papel para secarse al entrar el olor no era de lo más amigable. Quizás se trate de mala puntería de quienes usen el mingitorio, de falta de productos de limpieza o de una casualidad forzada por el ritmo de trabajo que no permitió que chequeen este aspecto ya que el bar se encontraba lleno. No lo se, pero sea como fuere es un puntito a corregir y sin demasiado esfuerzo.
Precios.
- Napolitanga, $75
- Cerveza Imperial, $44
- Solo de pago en efectivo, otro punto negativo
Dirección. León Morra 40, Barrio Junios.
Bitacoras.com
Información Bitacoras.com
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Dayana
Off topic de la reseña del lugar: no se impone que alguien (usted o yo) trate el tema de los baños en los lugares de eventos/restaurantes?
Parece que nadie lo tiene en cuenta, pero para mi es la cereza del postre en lo que hace a la calidad de un establecimiento. Por muy rica que sea la milanesa, no hay clientA (destaco que es más una cuestión femenina) que vuelva a pisar un lugar que no tenga baños en condiciones. Quizás para uds que no tienen mayor contacto con los sanitarios es más piloteable el tema, pero para nosotras es un asunto delicado.
Y cuento una anécdota gastronómica para ilustrar la cuestión: allá por 2007 en un viaje con Misión Córdoba visitamos Faimallá, donde se hace el campeonato argentino de la empanada. En la ocasión nos llevaron a la empanadería de la campeona para que degustáramos sus empanadas. El primero en pedir por el baño fue un hombre que volvió espantado avisándole al resto (casi 50 personas éramos) que se aguantaran hasta una estación de servicio porque el «baño» era una letrina con puerta de cortina de tela.
La segunda vez que fuimos a Faimallá, también con Misión y en 2011 si mal no recuerdo, la elegida fue la subcampeona exclusivamente porque tiene baños que pasan nuestro ITV.
No debemos ser el único caso de clientes que no volvieron más por baños que no colmaban las expectativas.
Mauro
Dayana, en mis primeras reseñas siempre miraba los baños y eso me daba cierta tranquilidad o no. No se porque pero soy de los extrapolan mentalmente la higiene del baño a la de la cocina… y en algunos casos el pensamiento es escalofriante. Se que no es algo que deba pensarse de forma lineal pero no puedo evitar pensar que si asi está el baño al que puedo tener acceso libremente, ¿como estará la cocina a la que no puedo acceder y desde donde sale lo que ingiero?
Un tuit de hace una semana me hizo recordar este aspecto y decidí volver a prestarle atención como en las viejas épocas.
Este es el tuit:
https://twitter.com/PickUpTheFork/status/438352155523973120
Mauro
Dayana, en mis primeras reseñas siempre miraba los baños y eso me daba cierta tranquilidad o no. No se porque pero soy de los extrapolan mentalmente la higiene del baño a la de la cocina… y en algunos casos el pensamiento es escalofriante. Se que no es algo que deba pensarse de forma lineal pero no puedo evitar pensar que si asi está el baño al que puedo tener acceso libremente, ¿como estará la cocina a la que no puedo acceder y desde donde sale lo que ingiero?
Un tuit de hace una semana me hizo recordar este aspecto y decidí volver a prestarle atención como en las viejas épocas.
Este es el tuit:
https://twitter.com/PickUpTheFork/status/438352155523973120
Fernando Bulacio
Ese lugar no me gusto ni ahi y como vos decis la limpieza de los baños era horrorosa…nunca mas…
Mauro
Fernando, hay que entender de que es un «bar popular». Creo que con esa premisa se encuadra perfecto.
Lo del baño es inaceptable.