ennio_carotaHace algunos años la señal de cable Utilísima transmitía un programa llamado Bajo la lupa. En este ciclo, Rose Galfione y Ennio Carota recorrían restaurantes movilizados en una motocicleta Vespa y las antenitas alertas para evaluarlos de punta a punta.

Rose y Ennio llegaban cronómetro en mano para medir la demora, luego pasaban a mirar en detalle sanitarios y cocina. Además, claro, de todo lo referente a los platos, la carta en si, higiene, ambiente y a la atención.

Resulta que este programa fue uno de los motores que impulsaron a sumar reseñas a este blog. O mejor dicho, la idea de hacer reseñas vino de la mano de No Reservations y Bajo la lupa le dio, mas o menos, una estructura a las reseñas. Lo cierto es que el tiempo pasó y con los años esa estructura fue mutando y hoy me encuentro con que desde hace tiempo no hago hincapié en el estado de los sanitarios pese a que sigo considerando una variable importante a la hora de disfrutar de un restaurante.

Para ser sincero, todo comenzó con un tuit de Allie Lazar, autora de Pick up the fork, quién en febrero contaba como en una cafetería/restaurante muy cool de Buenos Aires se encontraba con que son muy buenos para marcar precios pero quizás no tan rápidos a la hora de acondicionar los sanitarios. Ella lo contaba así:

Fue entonces que caí en la cuenta de que había dejado de prestar atención a este aspecto que, al menos para mi, es muy importante porque no puedo evitar extrapolar esa imagen a la cocina. Consciente de que no son aspectos comparables, o al menos no de manera lineal, siempre que veo un baño pobre de higiene pienso «¿si así está el baño al que todos tenemos acceso, ¿cómo estará la cocina a la que no podemos acceder?» y generalmente me deprimo. Muchos restaurantes parecen pasar largas horas maquillando sus perfiles en redes sociales, agregando nombres creativos a sus cartas pero poco tiempo probando sus propios productos o controlando la higiene del lugar.

Así fue que desde febrero los sanitarios volvieron a estar en la mira y a tener su espacio en cada reseña de este modesto blog.